La procuración de fondos es un área estratégica en todas las ONGs. Si bien existen metodologías, estrategias, planes, y metas financieras, quiero compartir diez reglas básicas de procurar fondos que nunca debemos olvidar para inspirar a nuestros donantes a ser aliados de nuestras causas.

1. No pedimos dinero, ofrecemos soluciones.

El origen de toda organización social es la disminución o erradicación de una problemática social. Por ello, debemos tener claro y saber comunicar las siguientes preguntas:

 
Las personas que donan su dinero, tiempo, y recursos lo hacen con la intención de ayudar. Por eso nuestro trabajo es sensibilizarlos sobre cómo su ayuda contribuye a la solución por la que trabaja nuestra organización. Sin importar cuál sea la causa, debemos invitar a la gente a que invierta su tiempo, dinero, y recursos en nuestra labor para que, juntos, brindemos soluciones ante un problema que es corresponsabilidad de todos.

2. Enfoque de ganar-ganar.

Si nos presentamos como “ayudantes” y otros como “receptores” de nuestra ayuda, nos sitúa en una condición de desventaja, así como a las personas con las que trabajamos. Debemos promover la igualdad y el hecho de que tenemos derecho a gozar de las mismas oportunidades sin importar nuestras condiciones.

Cuando estamos frente a nuestros donantes o inversores sociales, nuestro lenguaje debe promover tanto la corresponsabilidad en la resolución de los problemas como la ganancia mutua. Cuando una persona cree en nuestra organización y nuestro trabajo, espera recibir reconocimiento de que su dinero, tiempo, o recursos serán bien utilizados. Al informar e invitar al donante a formar parte de la solución, promovemos la corresponsabilidad.

3. Ser transparente.

Nuestro principal bien es la confianza. Las personas que son parte de nuestro trabajo—tanto los donantes como los miembros del equipo—merecen saber de dónde provienen los recursos que obtenemos, cómo los utilizamos, y cuáles son los resultados del trabajo que estamos haciendo.

La sugerencia es mantener una comunicación constante con cada grupo de interés a través de distintos medios, como redes sociales y boletines informativos, y comunicar de forma transparente los alcances de nuestros programas.

4. Promover corresponsabilidad.

Nuestros donantes son ciudadanos que de manera libre y solidaria, deciden contribuir a la mejora de su entorno. Es fundamental que los tomemos en cuenta para cada momento importante de la organización, como aniversarios, reconocimientos, logros, y aprendizajes.

Por otro lado, quienes participan en nuestros programas y proyectos pueden vivir con circunstancias diferentes a las que estamos acostumbrados; sin embargo, cuentan con recursos que son valiosos para identificar sus problemáticas y la resolución de éstas. Al final, nuestro trabajo y lenguaje debe promover la inclusión social y la construcción de ciudadanía, así como el ejercicio pleno de los derechos fundamentales.

5. Todo el equipo procura recursos.

Cualquier miembro de nuestra organización puede conseguir recursos financieros, humanos o en especie. Por lo anterior, es importante conocer la labor de cada equipo dentro de nuestra organización, para así poder colaborar y alcanzar metas en conjunto.

6. Predicar con el ejemplo.

En cada estrategia, proyecto, o programa que nuestra organización desarrolle, debemos preguntarnos, ¿nosotros haríamos una donación? Si tu respuesta es no, vale la pena hacer ajustes. Uno no puede inspirar a otros si no somos capaces de transmitir la pasión por la causa por la que trabajamos.

7. La procuración de fondos no es pedir dinero, es desarrollar relaciones.

Como en cualquier ámbito de la vida, las relaciones lo son todo. Es importante generar confianza, y ser capaces de conectar con otras personas para poder representar la labor que hacemos. Siempre que busques fondos, primer busca establecer alianzas—el dinero llegará después.

8. La prospección es esencial.

La prospección es saber pedir, a la persona correcta, en el momento correcto, el monto correcto, con la propuesta correcta y de la forma correcta. Nuestro trabajo requiere ser profesionales en lo que hacemos. Es importante tener un plan establecido, un mapeo de nuestros donantes, y tener claridad en nuestras necesidades y quienes nos pueden ayudar a resolverlas. Además, es imprescindible siempre tener el material básico de procuración—una presentación clara, breve, materiales de difusión de calidad, y los mecanismos adecuados para cerrar el donativo.

9. No hables de lo que no haces.

La confianza lo es todo, y es crucial siempre hablar con la verdad. La calidad del trabajo siempre será más importante que la cantidad de éste.

10. Siempre agradecer.

Es importante dar gracias a los donantes por cada donación que ellos hacen. Inclusive, sugerimos agradecer no sólo los donantes, sino cualquiera que muestra apoyo para su organización. Pues, siempre que uno muestra gratitud genuina, esta será bien recibida.